Tradiciones de Año Nuevo: Mochitsuki.

Cada Año (13 convocatorias en 2004) se celebra en Madrid la fiesta del mochi (organizada por la Asociación Japonesa de Madrid y el Colegio japonés de Madrid entre otros). Voy a hablaros de una de las tradiciones del Año Nuevo japonés, la preparación del mochi o mochitsuki.

El Mochi:

El mochi es un “dulce” (puede ser salado) típico del Año Nuevo y las grandes celebraciones japonesas y se prepara dulce o salado y se sirve en forma de bollito relleno de judía roja dulce (no confundir con las judías pintas ^_^U), combinado con alga nori (la que se usa en el sushi, por ejemplo) o con salsa de soja u otros ingredientes; Y con formas cuadradas, redondas o en una especie de galletas planas, según las ciudades y los barrios.

En realidad, aunque la fiesta que he mencionado, tiene lugar hacia mediados de Enero, normalmente el mochi se prepara antes de Nochevieja, hacia el día 29 o 30 (para que no se ponga duro) y se come como postre, dulce “del café” o como desayuno del 1 de Enero (Oshougatsu). Por cierto, llena la boca más que dos polvorones juntos… ^_^U

Preparación artesanal del Mochi
Preparación artesanal del Mochi. Source: KNS

Para preparar el mochi, y como podéis ver en las fotos de la fiesta, se necesitan varias cosas: Un barreño con agua, una pila de madera o piedra y algunos mazos pesados y por supuesto mucho arroz especial para la ocasión (mochigome). Porque el mochi es eso precisamente, pasta de arroz.
Su preparación tradicional (ya hay maquinas de varios tamaños, en las casas que pueden prepararlo) consiste en mezclar el mochigome ya cocido, con un poco de agua e ir golpeándolo con fuerza (esos mazos pesan bastante) en la pila con cierto ritmo. Ah! Mientras se golpea hay que gritar con fuerza Yoisho!… Generalmente eso lo grita el que mira, para animar al que golpea… ^_^U. El mochi puede ser preparado por varias personas a la vez, como si de una forja se tratara, para mantener el ritmo de los golpes.

Una vez se ha golpeado el mochi, y hay que golpearlo (hasta que adquiere la textura adecuada; como un chicle para que nos entendamos) durante mucho tiempo, el mochi se saca de la pila y se preparan dos cantidades de mochi, una para ofrecer a los dioses y otra para el consumo.

El mochi se prepara de muy diversas formas, directamente de la pila y en el caso del dulce relleno de judía roja (daifuku; que es un poco empalagoso) se hace una bola y luego se rellena con pasta de judía roja, previamente hervida con azucar. El isobeyaki es más sencillo, simplemente se sirve el mochi (que puede pasarse por la plancha sin aceite, unos segundos) acompañado de alga nori y salsa de soja. Pero hay muchísimas variedades más. Como he dicho antes, cada ciudad, barrio, pueblo… tiene sus propias recetas. En lo único que coinciden es en la utilización del mochigome y en la forma de golpearlo.

Tenéis que probar el mochi, esta muy bueno. Y uno de los mejores sitios (y más baratos) para hacerlo es en…

La Fiesta del Mochi en Madrid (Mochitsukitaikai):

Desde hace ya 13 (2004) años, el segundo Domingo de Enero, se celebra en Madrid la Mochitsukitaikai (nombre especifico de esta fiesta madrileña). Una fiesta en la que la comunidad japonesa de Madrid da la bienvenida al Año Nuevo. En esta fiesta, de libre acceso para todo el que quiera acercase (la entrada solo son dos euros), se come, se bebe, se celebran concursos para grandes y pequeños, se baila, hay exhibiciones y es una buena oportunidad para conocer a un buen montón de japoneses y para que ellos te conozcan a ti.

Actuación de los profesores
Actuación de los profesores. Source: KNS

En los varios años que he asistido, la fiesta ha tenido siempre un desarrollo similar (reíros de la puntualidad británica). Lo primero es empezar el año como diox manda: un discurso del embajador japonés en Madrid (mitad japonés-mitad castellano) y el acto abrir un barril de sake a golpe de mazo y beber de él para dar inicio a la celebración (esto es típico de casi cualquier fiesta tradicional japonesa).

Luego, todo el publico saludo al Año Nuevo a golpe de pulmón, mientras acompañamos a los profesores del Colegio japonés de Madrid en su interpretación de la sencilla Ichigatsu Tsuitachi (Literalmente: Enero-día uno, es decir Uno de Enero)… o alguna interpretación similar.

Y uno de los momentos más esperados por los padres y el público en general… La actuación de los niños de primaria… Que si bien este año no iban disfrazados de Pokemon, como en anteriores ediciones, nos sorprenden con sus coreografías y su desparpajo. A duras penas consigues hacer una par de fotos movidas para artículos como este, entre el impenetrable muro de padres armados con cámaras (digitales, por supuesto) de fotos y video.

Después de esto se abren al público los puestos de comida (bastante barata) y el éxito de esta y la gran cantidad de afluencia de público, hace que los tickets para la comida (preparada por miembros de los restaurantes japoneses de Madrid) y bebida se acaben en menos de una hora (de 3 que suele durar la fiesta). Mientras tanto en el salón principal se lleva a cabo la demostración del mochitsuki, en la que un miembro de la comunidad japonesa (normalmente el director del colegio) golpea sin piedad el arroz como he descrito antes más arriba. Los niños, también pueden participar en la demostración. Eso sí ayudados para poder coger el enorme mazo.

Un poco más tarde y para cerrar los actos, después de repartir los premios de los diferentes concursos (que varían de año en año: viajes, portátiles, mochilas…) se prepara en el escenario una demostración (a cargo de distintas asociaciones y clubs) de Iaido, algún arte marcial, bailes típicos tradicionales, ikebana, etc…

En las paredes del recinto, como no, a parte de la decoración japonesa (que incluye un centro floral de ikebana para el escenario) se podían apreciar los trabajos de caligrafía realizados por los distintos cursos del Colegio japonés de Madrid, cuyos alumnos junto con sus padres representan una buena parte del público.

Por cierto si os animáis a ir el año que viene, sabed que el idioma no es ningún problema, puesto que hay presentadores para los japoneses y los “extranjeros” (esa fiesta es territorio japonés ^_^) y carteles en los dos idiomas. Como he dicho, se celebra el segundo Domingo de Enero y el lugar exacto (que no ha variado, al menos, en 4 años) se da a conocer en los restaurantes y tiendas japonesas de Madrid y en la publicación mensual OCS (esta sí que esta solo en japonés)

Es interesante saber que a mediados de Julio, los mismos organizadores, preparan la celebración del Bon-Odori una fiesta (para honrar a los muertos) muy alegre con bailes, cantos y kimono de verano… Pero eso lo dejo para otro articulo ^_^

Por Kumo